Hace unos cuantos años, asistí a un ciclo de conferencias sobre las costumbres y creencias de diferentes tribus africanas. Durante una de las narraciones sobre los Turkana de Kenia, uno de los ponentes expresó que su mayor aprendizaje de aquella experiencia, fue entender lo importante que es “estar en tu Elemento”. Fue la primera vez que escuchaba esa expresión.
Después de darle unas cuantas vueltas, al final de la charla, me acerqué a él y le pregunté qué quería decir exactamente con eso. Me explicó entonces que había encontrado su Elemento en estos viajes porque, en esos momentos, sentía que confluía aquello que le encanta hacer, con lo que le enriquece a nivel personal y le da sustento económico. Te das cuenta de que estás en tu Elemento -continúo- cuando sucede todo esto y, además, tu personalidad se nutre y te sientes reforzado como ser humano.
Mientras entrevistaba a Berta Gascón, me vino a la cabeza aquella expresión. Sentí que mientras me narraba su experiencia, la dedicación al arte, la familia que ha construido y el lugar donde vive, la hacen estar en su Elemento. Algo que, por otra parte, no está exento de dificultades y que es difícil de mantener. Pero mejor que nos lo cuente ella.
¡Es impresionante la que habéis montado en medio de Los Monegros con ARTmósfera! ¿Cómo se gestó la idea?
Digamos que el arte vino a mí… todo se fue dando solo y de una forma natural para que terminara dedicándome a ello. Nací en Zaragoza. A los 18 años me fui a estudiar Traducción e Interpretación a Barcelona. Durante esos años de universitaria, empecé a practicar malabares y luego la vida me fue poniendo a diferentes artistas en mi camino. De pronto un día había fundado “ConMuchoArte”. Esto fue en 2008, con 24 años, en Berlín, ciudad en la que terminé viviendo 6 años. A través de “ConMuchoArte” he distribuido artistas internacionales por festivales de todo el mundo ¡Una vez hasta actuamos para Quentin Tarantino y su equipo de rodaje de “Malditos Bastardos”! También fui invitada a participar como jurado en el Festival Internacional de Teatro de Calle de Darbandikhan, Iraq, siendo la primera mujer en ostentar ese cargo. En 2013, me fui a Chile para ayudar en la organización de un festival y terminé quedándome 3 años.
¡Vaya! Veo que has recorrido mundo… ¿Por qué decidiste ubicar ARTmosfera en Los Monegros?
En Chile conocí a mi actual pareja y socio de proyectos. Juntos, soñamos con crear un espacio en el que poder albergar creaciones propias y de otras compañías, alejados de las grandes ciudades. Un proyecto que además significara un aporte al entorno, dinamizando artística y culturalmente el territorio. No sabíamos muy bien donde terminaríamos creándolo, pero yo tenía ganas de volver a mi tierra. Aragón nos parecía un lugar geográficamente estratégico, estamos en el cruce de caminos entre País Vasco, Cataluña, Francia y Madrid, que son grandes y potentes núcleos artísticos. Después de tener claro el lugar, una página de búsqueda de viviendas hizo el resto. Nos pusimos a buscar algo que encajara con nuestras necesidades y encontramos la finca en la que finalmente establecimos “ARTmosfera”, ubicada entre Robres y Grañen. Está rodeada de campos de cultivo, tiene una torre con capacidad suficiente para acoger a muchas personas y cuenta con espacios grandes donde poder entrenar disciplinas como el circo ¡Nos pareció el lugar perfecto!
Una vez que pasáis de la idea a la práctica ¿ha sido cómo esperabas?
Lo cierto es que la práctica ha sido mucho más extensa que la idea, porque en muy poco tiempo hemos diversificado mucho nuestra actividad y no solo funcionamos como un espacio de creación o en el que recibir actividades, si no que somos una asociación con numerosas propuestas y servicios orientados a dinamizar el medio rural a través del arte y la cultura. Llegamos a Monegros en 2016, inauguramos el espacio en 2017 y ya en 2018 recibimos el Premio Marcelino Orbés a la Mejor Iniciativa para la Promoción del Circo en Aragón.
Y después llega otro éxito con Mujeres Artistas Rurales (MAR)
Sí, la idea surge durante la pandemia, ¡tenía mucho tiempo para pensar! Desde que me había instalado en el medio rural, me daba cuenta de que las principales consumidoras y sobre todo creadoras de cultura en los pueblos eran las mujeres, y la mayoría de las veces de forma totalmente altruista y sin ningún reconocimiento. Pensé que cuántas mujeres habría en los pueblos de nuestro territorio creando arte y cultura desde el total anonimato y cuántas, con un poco de apoyo, habrían podido hacer mucho más. Por otro lado, veía una falta de difusión enorme respecto a las actividades que se estaban desarrollando en los pueblos. Como si lo que pasase fuese solo para la gente del pueblo y no hubiese necesidad de darlo a conocer fuera.
Se me ocurrió entonces crear una web en la que dar visibilidad a todas las mujeres creadoras de arte y cultura de Los Monegros, que sirviera también como agenda para saber qué estaba pasando y dónde. En cuanto empezamos a buscar a todas estas mujeres, nos dimos cuenta del total desconocimiento que hay por parte de las instituciones de quiénes habitan sus territorios, pues ni ayuntamientos ni comarcas podían darnos muchos datos sobre mujeres artistas de su zona. Quedó todavía más de manifiesto la invisibilidad a la que se enfrentan, y la necesidad de ubicarlas y visibilizar y promocionar sus trabajos. Hoy MAR es una plataforma que cuenta con más de 300 mujeres artistas o artesanas rurales aragonesas, una página web que sirve de catálogo y de la que ya hacen uso instituciones, medios de comunicación, personas privadas e incluso las propias artistas para poner en marcha proyectos en común con otras mujeres.
¿Cómo te sientes después de este tiempo viviendo en Los Monegros? Además ¡has sido madre de gemelos!
Me encanta vivir en un entorno rural, la paz y tranquilidad que respiras, la gestión del tiempo… Sientes que eres dueña de cada minuto que pasa. En la ciudad llevas otra velocidad, todo va más rápido. Pero lamentablemente hay situaciones y necesidades que solo pueden cubrirse en la ciudad y te ves obligada a volver a ella. Como es mi caso desde que fui mamá de gemelos hace unos meses. Por necesidades médicas de uno de mis hijos ahora paso la mayor parte de la semana en la ciudad. En el pueblo, ahora mismo, no puedo darle lo que necesita.
Cuando llegamos a Monegros, sin conocer a nadie, y empezamos a contarles a los vecinos que nos dedicábamos al circo y que estábamos creando un espacio artístico, nos decían que estábamos locos, ¿Circo? ¿En Monegros? Pero pronto establecimos una muy buena relación con los pueblos vecinos y nuestras propuestas tienen siempre muy buena acogida. Nos tratan con mucho cariño y eso es de agradecer.
Berta hace el favor de atenderme con un resfriado de campeonato así es que, después de un rato de charla, la dejo que descanse. Por mi parte, sigo leyendo más sobre el gran colectivo que sigue creciendo y que conforma MAR.
Si se han unido más de 300 mujeres artistas solo en Aragón ¿os podéis imaginar la de artistas rurales que tenemos repartidas por lo alto y ancho de todo país? Pues eso, que hay recursos y potencial para vivir bien en nuestros pueblos. Pero una vez más, necesitamos que las necesidades básicas y elementales estén cubiertas. Solo así cada persona podrá desarrollarse y acercarse a encontrar su Elemento no solo donde pueda, sino donde quiera.