El gusto por generar espacios de debate sincero, así como buscar la innovación en cada una de las ediciones, son dos de las máximas de este Encuentro. Para conseguirlo, hace falta una buena dosis de trabajo previo, mucha ilusión y una receptividad tan enorme, como la que brinda el ayuntamiento de la localidad, para que cada año se cierre la edición con una sonrisa mayor.
También es cierto que, las cosas que salen del corazón, llevan por guía al instinto y a la intuición. Quizás por este motivo, cada año nos acompañan más personas en Lugar de Encuentro, consiguiendo co-crear un ambiente de escucha, interés y participación del público, altamente nutritivo en todas las direcciones.
El cartel del evento anunciaba bastantes novedades. Una de las que más interés despertó, fue la presentación de la Residencia de Escritores. Una modalidad de creación literaria «in situ» y con publicación posterior, poco habitual en nuestro país.
Inspirada en otras experiencias europeas, la idea es que, el escritor Manuel Moyano -su primer inquilino- trabaje durante un año en un libro cuyo contexto narrativo se desarrollará en la Sierra de Segura. En este caso, se da relevancia a la percepción de alguien que no es oriundo de la zona. Nos alegró mucho saber que ya hay diversas editoriales interesadas en el resultado final.
Manuel Moyano es autor de más de 25 obras entre las que se incluye narrativa, relatos, literatura infantil, guías o ensayos, cuenta hasta la fecha con 11 reconocimientos literarios.
Durante su intervención en la jornada, el escritor comentó que, mientras conducía a lo largo de los 36 últimos kilómetros que existen de recta final hasta llegar a Santiago de la Espada, le parecía estar «navegando» en vez de conduciendo.
Ese último tramo de carretera, en caso de hacerse por una convencional, se podría concluir en unos 20 minutos. Pero, en este caso, se trata de una carretera-pista forestal, llena de curvas, con una anchura que hace difícil el paso entre dos coches en distintas direcciones, así como algún que otro acantilado en su trayecto. Se entiende pues que, en su caso, es más que recomendable no superar el límite recomendado de los 40 kilómetros por hora.
En estas condiciones, la conducción se transforma en un lento balanceo, que te hace entrar en un estado de navegación imaginaria. Cuando por fin llegas a la capital de la comarca serrana Santiago de la Espada, realmente parece que arribas a «puerto». La realidad es que el puerto con mar más cercano se encuentra a unos 250 kilómetros, pero es fácil entender el símil que hizo en autor con la «llegada a una isla remota» dadas sus condiciones de difícil acceso.
Moyano se confesó un amante de la Sierra de Segura. Tras la pregunta de Andrés Ortiz Tafur, gestor cultural del pueblo y escritor: «¿Por qué me dijiste que sí a la Residencia?», Manuel simplemente contestó «Porque me encantó la idea».
Entre escritura y publicación, pasará algo más de un año. Veremos entonces todo lo que Santiago- Pontones con sus gentes, naturaleza, clima, bares, sus días y sus noches, inspiran a este escritor de primer orden.
La segunda edición se ha prolongado a lo largo de tres días. Además de la presentación de la Residencia, ha habido mesas de diálogo entre profesionales que realizan su desempeño en el medio rural, así como la proyección de un documental y un debate posterior.
El encuentro se inauguró con la bienvenida del alcalde del municipio, Antonio Rodríguez. A continuación, junto a David Marcello Román, alcalde de San Emiliano (Babia, León) y Miguel Pérez, alcalde de Castril (Granada), se realizó la primera mesa de diálogo.
Los tres regidores expusieron las problemáticas de sus municipios que, aunque distantes entre sí, cuentan con muchas similitudes. La cuestión demográfica y el empeño por mejorar sus infraestructuras, fueron dos de los temas comunes.
Las otras temáticas que abarcaron los diálogos fueron la medicina y el pastoreo, este segundo, moderado por el periodista leonés Pedro Trapiello.
Los médicos Juan Francisco Barranco (Frigiliana-Granada) y Pedro Higueras (Babia-León) fueron los encargados de hablar del estado de la profesión en pequeñas localidades.
Como punto negativo coincidieron, entre otros, en la distancia que hay hasta el hospital comarcal más cercano y la problemática que esto supone a la hora de tener que hacerle frente a una urgencia. En cuanto a lo positivo, destacaron las redes de apoyo que se generan, sobre todo en el caso de las personas mayores que viven solas.
El naturalista y escritor Joaquín Araujo, compartió una charla sobre la importancia de mantener vivos nuestros pueblos, así como todo lo «natural» que habita y habitamos. De forma reincidente, hizo todo un alegato sobre la importancia y defensa de los árboles. En su caso, dijo tener la necesidad de «plantar mil árboles al año».
La tarde del sábado continuo con dos citas habituales, enmarcadas en Jaén. Inmaculada Herrador, hizo una revisión del estado demográfico de la provincia.
A continuación, los alcaldes Pascual Bermúdez, de Benatae; Juan Manuel Martínez, de Segura de la Sierra y, Antonio Rodríguez, de Santiago-Pontones, hicieron una revisión de los avances o problemáticas que han atravesado sus municipios desde que se dieron cita en el Primer Encuentro de 2023.
El domingo por la mañana, se cerró la jornada con la proyección del documental: ‘Dónde está mi acequia’, de la productora murciana Indirect Film. Al finalizar su visionado, se realizó un debate entre los asistentes.
Para más información, puedes visitar la página web del evento.